REFLEXIÓN
Colombia se ha caracterizado por ser un país de diversidad de cultura, fauna y riquezas naturales. Pero dentro de esta diversidad existe un conflicto interno político, social y económico, desde nuestros antepasados. Las confrontaciones de diferentes sectores y/u organizaciones sociales por el dominio del territorio convierten a los colombianos en personas vulnerables a las cuales se le violan sus derechos.
El poder político y económico hace pueblos con poco desarrollo con un alto índice de vulneración de los derechos humanos, sin calidad de vida. Un ejemplo de esto se evidencia en el desplazamiento forzado, abandono de tierras, desaparición forzada (corregimiento de pueblo Bello en municipio de Turbo Antioquia), Masacres (la chinita en Urabá).
En este orden de idea no se evidencia alternativas de resolución de conflicto pero si se hace evidente las tipologías del conflicto en el territorio nacional. Traigo a relación el caso denominado David el cual está afectado físico y Psicológicamente, lo que no le permitirá un completo desarrollo de su ser.
Desde una búsqueda de alternativas de resolución de conflicto es importante pensar en el valor del ser humano y las capacidades de adaptación al medio a su vez en el fortalecimiento de la familia y sus valores éticos y morales. Considerando esta como la base de una sociedad; desde esta óptica se apostaría más a la educación que a la guerra de poderes.
